sábado, 9 de agosto de 2008

rimbombante

qué forma de haber blogs. anduve navegando y decidí, no. no decidí nada, uno fue llevando a otro y encontré varias sorpresas. una parte de sinfonía desenraizada y otra llena de poesía, me encantó. van dejando letras, pisadas. raros. me resuena la palabra marquesina, a ver, creo que hace siglos no tengo un diccionario, hasta que descubrí el de la rae que a veces me sirve, intento entender de lo que leo como si me creara el diccionario que solo yo entiendo. las cosas tienen movimiento y esos ruiditos que suenan, escucho el tren en lontanaza -nunca supe si quería decir lo que yo creo que significa, y no me importa-. cuando los significados son míos y no los del resto, como pululan, en la casa de pato y yo "pululan las hormigas", claudine con su diccionario de haber entendido todo y saber traducir en belga cada palabra. "las hormigas no pupulan", primera reacción: y a vos quién te dijo que no pupulan, y qué suerte que la única autorizada para decir que pupulan en la cocina soy Yo. segunda y lo que pasó fue que una entiende siempre temprano, que las hormigas no pupulan, y que el verbo pulular es algo que a medias tintas termina por hacerle reír al nene que entiende que claro, tú sabes, que las hormigas pueden y deben -mejor deben- pulular en la cocina, en el living, en el baño y en todos aquellos lugares donde mejor- y qué mejor- se puedan llevar restos de comida, o gente a cuestas, y (y mejor de lo mejor) que tengan cola de chancho. oink.

2 comentarios:

PerroDinamita: dijo...

lontananza seignifica "a lo lejos"
pero no creo que te importe

chau sigo pululando!

Margot dijo...

siga! me encantó lo de "no creo que te importe". besos.